Fernando González
aún vive en Otraparte
Más de cuatro mil millones de pesos serán invertidos en la ampliación de la Corporación Fernando González Otraparte, ubicada en el municipio de Envigado.
Por Juan David Murillo Hoyos
En la que alguna vez fue la casa del escritor Fernando González, no sólo están guardados sus enseres, sino también muchos recuerdos e historias que se van revelando al visitante.
Destaca Sara González, nieta y quien hace las veces de curadora del lugar, que desde su fundación, el centro cultural fue pensado como una estrategia para preservar el mensaje y la filosofía de su abuelo. Partiendo de esto se busca inquietar al público acerca de la vida de este hombre, uno de los referentes más importantes del pensamiento antioqueño.
La Corporación está ubicada a la entrada de Envigado. Para mayores señas sobre la Avenida El Poblado y a todo el frente de la Clínica del Sur. Además de los textos de Fernando González, en el lugar se conservan grandes clásicos de la literatura; protegida dentro de una vitrina se puede apreciar una edición italiana de La Divina Comedia de Dante Alighieri y un libro de Dostoievsky. Otro extremo de la casa está adornado con las herramientas de campo, entre hachas y azadones, que algún día usó González.
Los visitantes podrán conocer también el bastón y la boina que utilizó, la que lo identificó en aquellos cuadros, que fueron pintados después de su muerte recuerda su nieta. «A él no le gustaba nada de eso», y se refiere también a las fotografías. Decía Fernando que no le regalaran nada de eso, que más bien le dieran plata, que le servía más.
Proyectos
Desde hace algunos años, la Corporación puso en marcha varios proyectos orientados al crecimiento del lugar. El principal de ellos es el Parque Cultural Otraparte, enmarcado dentro del Plan de Desarrollo de Envigado, para el cual se viene negociando el lote de un vivero para incorporarlo al Centro Cultural
Según Sara González, la idea es que estas zonas se conviertan en un «pulmón» para oxigenar la casa con nuevos espacios, ya que el legado de Fernando González es tan amplio que el lugar resulta pequeño para albergar toda la colección del escritor.
En la actualidad, la casa abarca mil metros cuadrados y, se estima que el área a recuperar sea en total de 3.050 metros cuadrados. La inversión, señala Sara González, podría superar los 4 mil millones de pesos.
La intención es, entonces, expandirlo no sólo como centro cultural sino también como espacio ecológico, con un parque, un auditorio, un teatro al aire libre, una biblioteca y un café para la tertulia.
«Queremos que sea un verdadero museo», expresa Sara, y añade: «Ya tenemos algunos contactos para realizar algunas exposiciones», pues según cuenta la idea es sacar a Otraparte de Envigado para que Medellín entero conozca, o bien, se reencuentre con Fernando González.
Alguna vez dijo Gonzalo Arango: «La deuda que Colombia tiene con Fernando González nunca será cancelada, mientras su pensamiento no haya sido totalmente integrado al alma viva de la nacionalidad. Nadie como él es en Colombia el contemporáneo de la juventud; nadie como él ejerce una comunión más viva y directa con el espíritu nuevo, con sus ímpetus y rebeliones. Su obra irriga de vitalidad el corazón de nuestro tiempo».
Mucho por hacer
«Aquí hay mucho por hacer», dice Sara González al inquirirla por las carencias de la Corporación. Y es verdad, no sólo los textos propios del autor, sino también los que integran su colección personal se ven amenazados por las humedades y los roedores que acechan la edificación que data de 1940.
Precisamente para recuperar sus textos hace pocos días salió al mercado El payaso interior, una recopilación de aforismos del escritor, publicados bajo el sello del Fondo Editorial de la Universidad Eafit. «La razón no puede cambiar en nada el modo de ser de una persona. El hombre obra instintivamente no por lo que sabe, sino por lo que es», dice en uno de ellos.
Con miras a realizar futuras publicaciones, en la actualidad se adelanta la trascripción de más de 70 libretas personales que dejó el autor envigadeño.
Para el sostenimiento económico, la Corporación Otraparte rediseñó el proyecto «Amigos de Otraparte», que es una especie de «apadrinamiento» que maneja las figuras de amigos, benefactores y mecenas de la entidad, de acuerdo al monto otorgado voluntariamente por cada persona.
La Casa de Fernando González tiene sus puertas abiertas al público de lunes a viernes entre las 10:00 y las 6:00 p.m., y los sábados entre las 10:00 y la 1:00 p.m. Se realizan visitas guiadas y diversos programas culturales, que incluyen tertulias y miércoles de cine.
«Les damos una especie de abrebocas y si a la persona le interesa le solicitamos el correo electrónico respectivo», dice Sara González, haciendo claridad en que a través de este medio se informa acerca de la programación a los más asiduos visitantes del lugar. Quienes lo deseen pueden visitar la web Otraparte.org, reconocida hace unos años con el Premio Internet Colombia 2001.
Fuente:
El Mundo, sección «La Movida», jueves 12 de enero de 2006.