Presentación

Desvanecer reinos
en silencio

—21 de septiembre de 2023—

* * *

Ver grabación del evento:

YouTube.com/CasaMuseoOtraparte

* * *

Julio Fabián Salvador (@juliofabiansalvador) (Lima) es poeta y narrador, magíster en Escritura Creativa de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en Lima, Perú, magíster en Física de la misma institución y doctor en Física de la Universidad de Antioquia. Ha publicado «Eigen», «Zumbante nervio», «El silencio de la máquina», «Pared del sol», «Darkness» (Premio Nacional de Poesía FELIZH), «Sextinas, la matemática de la poesía» (coautor), «El aire que corta la piel», «Un tiempo alucinado en oscuridad», «El viaje hacia Andrómeda» y «Desvanecer reinos en silencio». Actualmente se desempeña como profesor universitario y consultor científico en patrimonio cultural.

Presentación del autor y
su obra por Lorena Zapata.

* * *

Nueve Editores. Clic en el logo para visitar su página web.

* * *

Crece en esta novela un coro de muchas voces en el paisaje humano casi siempre indómito que Julio Fabian Salvador ha sembrado con el tacto de la poesía. El libro tiene a un hombre que palpita en su historia, en ella el camino sin retorno de quienes viven en el amor y el incesante cultivo de la esperanza. Germina, entonces, la lectura, y en complicidad con los lectores nace, en cada giro de los personajes, una cercanía suspicaz y envolvente. Los que tienen en sus manos este libro lograrán sumergirse en mundos asombrosos.

Lorena Zapata

*

Juan Príncipe, un profesor de inglés, parece haber entrado prematuramente al ocaso de sus días. Amante del origami y sumido en la soledad y el desgano, apenas soporta su oficio. Le mantiene su hija y la necesidad de crearle nuevos mundos a través de la escritura, la filigrana de la tinta, las sombras y la creación de mundos paralelos que abren puertas entre la realidad y la fantasía. Reinos, paradojas, personajes y escenarios que nos evocan Alicia en el país de las maravillas generan una novela vertiginosa, con personajes y escenarios que nos procuran el desconcierto. Entre la fantasía y la ciencia ficción, la obra de Julio Fabian Salvador nos deja en la puerta de una aventura sin límites.

Esteban Hincapié

* * *

Julio Fabián Salvador

Julio Fabián Salvador

* * *

Desvanecer reinos en silencio

~ Fragmento ~

Por Julio Fabián Salvador

El desterrado soldado, cuyo nombre era Bedivere y que había sido perdonado por el príncipe, emprendió un rumbo desconocido. El soldado sobre su caballo no tenía camino trazado. «¿Qué puede ser un hombre sin reino y sin hogar?», se preguntaba el solitario hombre. El horizonte antes tenía una dirección, se dejó llevar por el desvarío y por los pasos que daba su caballo. Sentía que algo en su pecho le apretaba, una culpa que lo había convertido en un hombre apesadumbrado y resentido. No conoció a sus padres, sus mejores amigos eran los guardias y soldados del reino, aquellos con los que creció, sus pocos y viejos parientes habían muerto y otros se marcharon a buscar nuevas tierras. En cada aldea a la que llegaba, se enteraba de los triunfos de su antiguo señor, el príncipe Darío, a quien la valentía y el coraje lo habían convertido en un ser legendario. El exsoldado resistió la inclemencia y la incerteza. Desganado, el compungido hombre apenas podía con su sombra, deambulaba día a día con su añoso caballo de piel plateada, dormía muchas veces en medio de los bosques y se libró de muchos asaltos gracias a la pericia de su equino acompañante. Lograba dormir en lugares inhóspitos. En los largos caminos pudo vislumbrar las cimas de las montañas, los picos de nieve lo conmovían. Se preguntó si esas montañas imponentes podrían tener un lugar para él. Una mañana de invierno, mientras arribaba a una aldea, Bedivere vio que un achacoso hombre era expulsado de una cantina, se acercó a él y lo levantó del suelo. El frío era intenso y sabía que, si dejaba al anciano abandonado a su suerte, moriría. Así que lo subió al caballo y se lo llevó. Avanzó unas leguas y se detuvo cerca de una loma, donde se detuvo y preparó una fogata. Cocinó los pedazos de carne salada que llevaba, e hizo hervir agua con algunas hierbas del bosque. El vetusto hombre durmió como una bestia moribunda hasta que muy de mañana despertó.

—Levántese, soldado —dijo el viejo con lucidez y movió el cuerpo de Bedivere que se había quedado sumergido en un profundo sueño.

—Viejo señor, ¿qué le ha pasado, ya está mejor? —pronunció el mancebo hombre con algo de fastidio y dijo—: Pudo haber muerto ebrio y congelado si yo no lo recogía.

—Le agradezco ese gesto, le debo mi vida. Me presentaré, soy Joaquir, antiguo escriba del legendario reino azul donde aún vive el viejo rey Ananías, señor de las tierras del Sur, pero ahora solo vivo contando historias en las aldeas que visito y me gano algunas monedas para alimentarme y alquilar posada. —En ese momento, mientras el señor de barba gris hablaba, tres ratones blancos salieron disparados del bolsillo derecho de Joaquir, eran sus amigos y sus únicos acompañantes. Él los había criado desde hacía varios años. Un viejo mago se los había regalado, era un pago por un hecho asombroso que realizó el viejo escriba y desde el día que los tuvo en sus manos jamás le abandonaron.

Fuente:

Salvador, Julio Fabián. Desvanecer reinos en silencio. Nueve Editores, Bogotá, 2023.