Con el próximo beso
le pego un tiro

Dirigida por
Hans-Christoph Blumenberg
Alemania, 1996 – 82 minutos

Historia de Reinhold Schünzel, el único director de cine judío a quien le fue permitido trabajar durante el régimen del Tercer Reich. En 1933, mientras rodaba en Egipto, se entera de la toma del poder de Hitler. “Un desastre para Alemania”, advierte el productor Günther Stapenhorst, pero Schünzel no se inquieta: “Jugaré un pequeño juego con estos señores”. Luego escapó a Hollywood, donde trabajó en películas sobre la Segunda Guerra mundial, actuando siempre como el sádico y malvado nazi. Schünzel realizó brillantes comedias musicales, como Viktor y Viktoria (1993), de la que se incluyen algunos fragmentos en esta película que constituye un apasionante estudio sobre la relación entre el arte y el poder.

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