Lila dice

Dirigida por Ziad Doueiri
Francia, 2004 – 89 minutos

Chimo, un joven de ascendencia árabe, vive sin ilusiones en un barrio marginal de Marsella. Pasa casi todo el tiempo con sus amigos, que representan la opción nihilista y sin futuro de cierta juventud emigrante, y vive con su madre, a quien acompaña después de que el padre se fue de la casa. Sufren el desempleo, la escasa fe en el futuro, la poca voluntad de integración en un mundo al que no acaban de considerar como propio. Sin embargo, Chimo tiene algunas oportunidades, pues posee un don especial para escribir y gracias a él tiene la posibilidad de ir a París a estudiar en la universidad, pero no demuestra interés en que las cosas cambien, todo le da igual y prefiere dejarse llevar. Hasta que aparece en el barrio la joven e irresistible Lila, quien sacude como un terremoto su rutinaria existencia. Lila es vida, deseo, curiosidad, amor, imaginación, sorpresa. Es un rayo que atraviesa a Chimo y lo hace estremecerse, dudar, descubrir, sentir. De repente, el mundo recobra su interés, hay alguien que importa, que merece la pena ser conocido y sentido.

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