Grupo ASPA
Cátedra Permanente
La Revolución Francesa
y el Museo del Louvre
Invitado: Javier Domínguez H.
—Octubre 28 de 2011—
Asociación Antioqueña de Profesionales
con Estudios en Alemania (Aspa)
La charla aborda la función que cumplió la Revolución Francesa en la fundación de este célebre museo en 1793. La furia de los revolucionarios y el afán de destruir todo lo que representaba el despotismo del antiguo régimen (pinturas, esculturas, símbolos, muebles, edificios) obligó a la Asamblea General a salvar de la desaparición y a conservar de un modo educativo estos apreciables objetos. El Louvre fue la Institución que se destinó para ello, primero como Museo Nacional de las bellas artes y las ciencias. La concepción pedagógica original pronto se convirtió en la concepción romántica del museo como “Templo del Arte”, idea que a lo largo del siglo XIX fue extendiéndose por las ciudades de Europa.
Javier Domínguez Hernández es doctor en Filosofía de la Universidad de Tübingen en Alemania, profesor titular de Filosofía y miembro del Grupo de Investigación en Teoría e Historia del Arte de la Universidad de Antioquia. Actualmente es una de las máximas autoridades de Colombia en el campo de la estética.
La Asociación Antioqueña de Profesionales con Estudios en Alemania (Aspa) es una entidad sin ánimo de lucro que agrupa a profesionales de diversas ramas del conocimiento que han realizado estudios profesionales, prácticas profesionales, especializaciones y doctorados en Alemania. La entidad fue creada a mediados de los ochenta y tal vez su principal riqueza consiste en la amplitud del espectro de sus socios, que pertenecen a las más diversas ramas del conocimiento humano.
Una de las actividades más antiguas y queridas de Aspa es la Cátedra Permanente, en la que alguno de sus socios o amigos expone un tema de interés general, procedente de los diversos campos: música, administración, ciencia, literatura, historia, técnica, etc. Las charlas se caracterizan por una agradable informalidad y por una exposición sencilla, apta para el público general, que se hace posible precisamente por la solidez académica de los conferencistas.
Tal vez con alguna reminiscencia de “La Huerta del Alemán”, que luego Fernando González rebautizó como Otraparte, Aspa hace presencia en esta casa museo para realizar las sesiones de su Cátedra Permanente que tendrán lugar el último viernes de cada mes.