Casa Museo Otraparte. Habitación de Fernando González y Margarita Restrepo. Fotografía por Efraín Zapata para El Informador de Comfama.
No me detendré en narrar detalles de mi entrada a la casa de mis amores con el frasquito de Aurum. Sólo diré que era dulce y acogedora la presencia, y deleitosos, apaciguadores los modos de doña Berenguela cuando me condujo al cuarto del ogro. Estaba con la espalda sobre una almohada puesta contra la barandilla de la cama estrecha, cubierto hasta la cintura con la manta y un cubrepiernas amarillo. Al lado, una mesita circular blanca, baja, en que había dos libros y varias libretas de apuntes. Sobre el cubrepiés tenía una libreta principiada, pues entre ella se veía la pluma de fuente. Alcancé a ver que la tinta era de rojo amarillento, algo como sangre venosa pálida, pero de esa tinta que no necesita secante.
Fernando González
Libro de los viajes o de las presencias