Ciclo de Conferencias
Software Libre
en Otraparte
—Junio 6 de 2009—
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El sábado 6 de junio continuaremos el ciclo de conferencias sobre el Software Libre y la relación de este producto intelectual con el concepto de Cultura Libre y el dilema hamletiano de copiar o no copiar… En el siguiente encuentro realizaremos un foro para discutir los diferentes modelos de negocios relacionados con el Software Libre, y contaremos con la participación de Eder Acevedo, Ingeniero de Sistemas de la Universidad Luis Amigó y empresario que fomenta y aplica esta tecnología en su negocio, y Elkin Botero, Consultor de Sistemas, quien trabaja para un consorcio internacional que tiene como base de negocio el Software Libre. El ciclo está coordinado por Fernando Castro T. (“Kleper”), estudiante de filosofía de la Universidad de Antioquia, quien se desempeña como asesor en la instalación de software libre para todo tipo de usuarios y actualmente forma parte del equipo de trabajo de la Corporación Otraparte.
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La empresa ante
el Software Libre
Fragmento: 4.3
La sociedad de la información
Por Juan Antonio Martínez
La sociedad de los países industrializados tiene una serie de características que la hacen destacar sobre otras sociedades: una renta per cápita superior a la media, un desplazamiento de su actividad productiva hacia el sector servicios, una serie de valores económicos y culturales “occidental”. Una vez caído el sistema productivo “comunista”, la sociedad de mercado con sus ventajas e inconvenientes se ha hecho con la hegemonía de las sociedades industrializadas. Y con ella un fenómeno que en los últimos años se ha hecho patente: vivimos en la sociedad de la información. Tanto es así que nuestro modelo económico se basa en muchas ocasiones para su desarrollo en la posesión y manejo de información más o menos valiosa o privilegiada. Una frase de periodistas es: “Quien tiene la información, tiene el poder”.
Sociedad de la información y sociedad informada
Pero la realidad es otra: el poder no está en quien tiene la información, sino en quien sabe manejarla. En un mundo con superabundancia de fuentes de información (tanto es así que más de un ensayista ha escrito que la sociedad de la información implica el fin de la historia según se describe desde la dialéctica marxista) es un problema real el manejo y proceso de tanta información. Frecuentemente se produce un fenómeno de overbooking de información, o bien aparece la problemática de “separar la señal del ruido”, es decir, del discernimiento entre información relevante o desechable. No en vano un nuevo concepto ha aparecido dentro del mundo de las tecnologías de la información: el Data Mining. Hasta hace unos años era impensable que tal necesidad de control de la información fuera no ya necesaria, sino hasta imprescindible para la supervivencia de una empresa.
El fenómeno Internet
En este contexto de sociedad de la información, aparece el fenómeno Internet. A nivel sociológico podemos decir que Internet ha convertido el fenómeno de la información y el acceso a ésta en un mecanismo al que todo el mundo puede acceder, sin más que unos mínimos recursos. Se dice que Internet ha “democratizado” el acceso a la información. Sin entrar a valorar el valor de la información disponible, podemos hacer una primera clasificación en función de los contenidos:
- Información destinada a favorecer el consumo: hablamos de publicidad
- Información destinada al ocio y tiempo libre: juegos, viajes, turismo, etc.
- Información cultural
- Información socio-laboral
- Información científica y técnica
- Meta-Información: Material sobre como buscar más información (portales)
Reinventar la rueda
Ante este hecho, cuando un usuario necesita información tiene dos opciones: o intentar localizarla, o bien generarla por sí mismo. En cualquiera de los dos casos esto tiene un coste, que para una empresa se traduce en un coste económico. En el segundo caso, deberá dedicar una serie de tiempo y dinero en hacer que sus trabajadores elaboren dicha información. En el caso primero, dichos trabajadores deberán emplear el tiempo en localizar la información, y sobre todo en procesarla para que sea de utilidad a la empresa. Sea cual sea el proceso elegido, ello implica muchas veces el que la información tenga que ser varias veces asimilada y procesada. La consecuencia global es que en el mundo empresarial “la rueda se reinventa” constantemente.
En cualquiera de los dos casos una vez que la empresa tiene lo que necesita, se plantea la necesidad de dar una salida a dicha información. En función del modelo elegido obtenemos dos modalidades de empresa: Cerrada (el resultado de su trabajo es de uso exclusivo de la empresa) o Abierta (se comparte —de forma más o menos aprovechable— el resultado del trabajo de la empresa). Cuando una empresa trabaja con el modelo abierto, decimos que adopta un modelo empresarial tipo “Software Libre”.
Uno se puede plantear cómo un modelo basado en compartir la información —que ha costado dinero obtener y procesar— puede ser beneficioso económicamente. La respuesta reside en varios conceptos que analizaremos en los siguientes capítulos. Baste resumir algunos de ellos:
- Una empresa abierta no vende información: vende servicios.
- Los costes de elaboración son infinitamente menores que los de distribución y marketing.
- Existen multitud de fuentes alternativas de beneficios, aparte de los derivados de la venta de la información, que en el caso de una empresa abierta son —en el caso ideal— nulos.
El software libre es tan antiguo —o más— que Internet. De hecho podemos decir que Internet no existiría sin el software libre. Desde que en los años 60 los Bell Laboratories cedieron el código fuente de su recién inventado Sistema Operativo UNIX, hasta la última versión del núcleo Linux, la historia del software se basa en el intercambio de información.
Fuente:
Wikilearning.com